Construyendo tu nuevo Yo
Como he explicado en el apartado de “Neurociencia”, para lograr cambios reales y duraderos en nuestro cerebro y en nuestros programas mentales y emocionales, necesitamos acceder a un estado de la mente que no sea el habitual y conocido.
A través de diferentes ejercicios de respiración consciente y meditaciones guiadas que practicarás en las sesiones de terapia, podrás aprender por ti misma a ralentizar tus ondas cerebrales y bajar a los niveles alfa y zeta, en las que tu cerebro abre el umbral hacia el subconsciente. En ese estado de relajación, estarás en disposición de desmemorizar todas aquellas emociones, pensamientos y conductas que quieras erradicar de tu vida, y reprogramar tu corazón y tu mente para que establezcan nuevos circuitos neuronales, que a su vez enviarán nuevas señales electromagnéticas a tus glándulas, a tus células, y al campo cuántico.
Gradualmente irás pasando de vivir una vida que estaba sujeta a los mandatos de tu mente inconsciente, donde prácticamente todas tus experiencias eran conocidas y predecibles, a convertirte en la creadora de una nueva realidad, una nueva vida. El miedo, la ansiedad, la culpa, la ira, la depresión y el estrés irán desapareciendo de tu vida y de maneras sorprendentes atraerás personas y situaciones nuevas que encajarán con tu nueva vibración energética, pues el campo cuántico responde a nuestra vibración materializando en nuestra realidad la misma frecuencia de aquellas emociones que previamente hemos experimentado en los estados de relajación.
A medida que vas progresando en tu práctica, el cerebelo, que es la sede de tu inconsciente, empieza a memorizar un nuevo “Yo” neuroquímico, convirtiendo ese estado emocional en el que te hayas enfocado en tus meditaciones, en una nueva parte de tu programación inconsciente. De esta manera, la emoción, actitud, rasgo, pensamiento, o conducta en la que estés trabajando, se convierte en un programa memorizado de tu nuevo “Yo”. Esto ocurre cuando has logrado que tu cuerpo y tu mente funcionen como una unidad, en armonía y coherencia, y ahora te resulta cada vez más fácil soltar aquel estado químico interior de sufrimiento en el que vivías y crear el estado de paz y felicidad que siempre habías deseado.

Puedes "vivir" la experiencia sin haberla vivido en la realidad
Para que tu mente inconsciente acepte que te sientas feliz, en paz, agradecido, pleno, dichoso, y todos esos estados emocionales que prácticamente todos nosotros deseamos experimentar, antes debes dejar espacio libre para que esta nueva frecuencia vibratoria pueda asentarse en tu campo energético de forma permanente.
Para ello, deberás escoger una emoción que quieras erradicar de tu vida y trabajar con ella en tus meditaciones. Podría ser el miedo que te ha acompañado desde siempre, la ansiedad, la soledad, el sentimiento de no ser digno de ser amado, tu complejo de inferioridad, etc. A través de la práctica de unas técnicas muy concretas que aprenderás en las sesiones, lograrás traer a la conciencia los programas y pensamientos inconscientes que estaban asociados a esa emoción, y serás capaz de activar nuevos circuitos para transformarlos en nuevos programas mentales que a su vez generarán una nueva emoción en tu inconsciente. La emoción que tú desees.

Una vez que ya eres capaz de sentir esta emoción y de visualizarte viviendo con ella posibles situaciones futuras en las que antes se activaba el miedo o la ansiedad, tu inconsciente no sabrá distinguir si esa situación que estás experimentando a nivel emocional está ocurriendo en la realidad o sólo en tu interior, y registrará los nuevos circuitos asociados a esa experiencia y a esa emoción como si fueran reales.
Esto se traduce en que se producirán cambios químicos y neurológicos en tu cerebro y en tu cuerpo, y con el tiempo ya no necesitarás visualizarte experimentando esa nueva emoción, pues se habrá hecho real en tu vida.
Desde tu yo energético, la habrás materializado en tu realidad física, y lo habrás hecho creando ese estado mental, físico y emocional cada día, reviviendo continuamente la experiencia y produciendo las respuestas emocionales de estar siendo la persona ideal que deseas ser.
El día que puedas levantarte de la meditación y conservar este nuevo estado mental que ha cambiado a nivel neurológico, químico y genético, significará que has activado estos cambios antes de que la experiencia se materialice en tu vida, y sentirás un nuevo impulso interno que te llevará a pensar y a actuar de acuerdo a quien estás siendo ahora.

Cuando cambio mi estado interior, ya no necesito que el mundo exterior me dé un motivo para sentirme feliz
